Este proyecto nace de una reflexión sobre la migración: el acto de mudarse, desplazarse o cambiar de espacio, ya sea por voluntad, necesidad o la imposibilidad de encontrar lo deseado en el lugar de origen. Mi interés en estos relatos de partida, desarraigo y ausencia se origina en el desplazamiento forzoso de mi familia materna, complementado por mi propia inquietud sobre la vida fuera de Colombia. Esta idea de emigrar, aunque no siempre realizada, se ha convertido en una constante reflexión; un estado de "estar y no estar" que me ha llevado a vivir como una nómada en mi propia ciudad, buscando espacios temporales y proyectando un futuro incierto.

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La gestación de Mudanzas se nutrió también de la creciente necesidad de emigrar observada en mi entorno cercano, con familiares y amigos estableciéndose en geografías distantes. Estos encuentros me permitieron percibir la ambigüedad de quienes se arraigan en nuevos lugares mientras mantienen una relación, a menudo ficticia, con su país de origen y su lengua, habitando un intersticio entre culturas. Historias como las de mi suegro en Londres o mi tía Nidia en Inglaterra, revelaron las complejidades de vivir en esta constante bifurcación.

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A partir de estos diálogos y de mi propio deseo de mudanza, surgió el guion de la película como un diario de viaje, un disco y un show en vivo. Mudanzas narra la odisea ficcional de Marta, una viajera que busca a sus amigas y familiares, quienes se han ido en un intento desesperado por encontrar su lugar en el mundo. En su camino, llega a lugares insospechados, donde descubre diversas perspectivas de la migración: desde los caminantes latinoamericanos y los problemas sociales que el desplazamiento genera en cada país, hasta la migración por el cambio climático o las realidades de burocracia, injusticia y violencia. En su trayecto, Marta se encuentra con seres míticos en mares y desiertos, guiada por animales como un pájaro, una ballena y una sirena, siendo el pájaro migrante su compañero constante.

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